Como suele decirse: los pequeños detalles cuentan. Y en la gastronomía esto funciona especialmente bien. Por eso, hoy veremos los mejores “complementos” para cremas de verduras que alegrarán y realzarán tus platos de manera espectacular.
Crema de verduras como plato único
Si hacemos cinco comidas al día, como recomienda la OMS, mejoraremos en muchos aspectos nuestra salud y bienestar. Un error frecuente que cometemos en el sur de Europa (especialmente en España) es omitir el desayuno, hacer un mal almuerzo a media mañana y llegar a la hora de comer muertos de hambre y con ansiedad. Comer de forma copiosa todos los días es perjudicial para nuestro organismo y para nuestro rendimiento. Las digestiones pesadas pueden hacer que la segunda mitad del día sea improductiva e incómoda.
Una crema de verduras con los toppings adecuados puede ser un plato único que nos deje perfectamente saciados. Ingredientes naturales, una alta proporción de vegetales y los carbohidratos y proteínas justos como acompañamiento, son un plato principal más que suficiente para un adulto medio.
toppings para cremas de verduras
Crujientes de proteína animal
Lomo, jamón, bacon… prácticamente cualquier embutido nos sirve para crear un topping que realce una buena crema de verduras. Además, podemos hacer nuestros crujientes en el microondas, de manera que sean todavía más saludables, pues pierden la grasa sobrante y simplemente sufren un proceso de deshidratación que los convierte en un perfecto acompañamiento crunchy lleno de proteína.
Le van especialmente bien a las cremas más dulces como la de coliflor o calabaza, y por supuesto a las sopas frías como la vichyssoise o el salmorejo.
Topping de vegetales
En ocasiones, lo más obvio y sencillo es lo que mejor funciona. Hacer un topping con el mismo ingrediente principal de nuestra crema, puede ser la mejor manera de acompañarla. En el caso de la crema de guisantes, por ejemplo, le quedan estupendos unos guisantes salteados con hierbabuena. Un chorro de aceite de oliva y es el plato 10 para cualquier tipo de dieta.
La crema de zanahoria también funciona genial con bastoncitos de la propia hortaliza al horno. Haz cantidad para aprovechar que enciendes el horno y te quedarán como picoteo para cualquier merienda.
Pan tostado
El picatoste no falla. Usa el pan que se ha quedado duro para hacerlos. Solo tienes que cortarlo en dados y freírlo a máxima temperatura en un chorrito de aceite de oliva. Espolvorea perejil por encima cuando lo saques de la sartén y déjalo escurrir en papel de cocina antes de incorporarlo a la crema.
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