El otoño ya está aquí y con él vuelven a las estanterías muchas verduras típicas de esta estación. Las frutas y verduras de otoño son aquellas variedades que se cosechan en esta época del año, las que sobreviven al frío que llega después del verano..
Las verduras de otoño
Entre las ricas verduras que llegan en otoño, se encuentran las calabazas, las coles de Bruselas, las remolachas, las chirivías, los nabos, las zanahorias y varios tipos de lechuga, como los canónigos, las lechugas iceberg y las escarolas.
Hoy veremos cómo preparar algunas de las verduras de temporada más versátiles.
preparación
Zanahoria
Las zanahorias son un clásico absoluto en las cocinas de todo el mundo, pero no por ello hay que subestimarlas. Este tubérculo va bien en una gran infinidad de platos tanto nacionales como internacionales, ya sea en una típica ensalada mixta o en un curry vietnamita. Además, esta verdura de otoño es fácil de digerir por su contenido en potasio, calcio y hierro, y tiene pocas calorías. Por cierto, ¿sabes por qué las zanahorias son de color naranja? Pues los responsables son unos metabolitos secundarios llamados carotenoides, los cuales actúan como antioxidantes y que, entre otras cosas, protegen nuestras células.
La mejor forma de preparar las zanahorias es… ¡cualquiera! Pero, sobre todo, aquellas en las que las zanahorias mantienen su textura crujiente y su jugosidad. Salteadas o asadas son la mejor forma de consumirlas cuando están en su pleno apogeo.
Si has comprado demasiadas o se te han olvidado en la nevera, haz tarta de zanahorias. No hay una receta dulce mejor para este otoño.
Coles de bruselas
Un otoño sin coles de bruselas no es un otoño de verdad. Sobre todo si son las coles de bruselas elegidas por los consumidores para el Premio Sabor del Año, como las de Primeale.
Es un alimento muy versátil porque los distintos tipos de col, como la coliflor, o las coles de bruselas tienen sabores totalmente diferentes y, por lo tanto, aportan una gran variedad a un mismo plato. Además, todas las coles tienen algo en común: contienen muchas vitaminas y minerales, como las vitaminas B, la vitamina C, el ácido fólico, el calcio y el hierro.
Una forma estupenda de prepararlas es salteadas. Solo un poco de aceite, sal y, quizá un ajo laminado para realzar su sabor es la mejor manera de apreciar este excepcional producto de increíble textura y de matices al paladar.
El dulzor de la col de bruselas funciona muy bien como acompañamiento a platos de carne, pero queda increíble con pasta o en arroces.
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